Por: Dulce García | cydnoticias.mx |
Es común que para referirnos a alguien de quien desconocemos su nombre o en cierta forma lo referimos como alguién despectivo, utilicemos a: fulano, mengano, zutano y perengano, que además no existe un registro histórico sobre personas que se hicieran llamar así.
Entonces, ¿qué son o de dónde salió la expresión de “fulano de tal” y el resto del grupo?
Tanto fulano, como zutano, mengano y perengano, son cuatro formas gramaticales que se utilizan para referir a alguien del que no se sabe su nombre o no se quiere decir por cualquier motivo.
- Fulano: Proviene del árabe fulān que quiere decir: persona cualquiera, y es el más utilizado, con expresiones coloquiales como: “fulano de tal”, que puede ser usado en situaciones como “Ha venido un fulano preguntando por ti”.
- Mengano: Proviene del árabe: man kān, que significa: quien sea.
- Zutano: Proviene de citano y éste, muy posiblemente, de la palabra latina scitānus, que significa: sabido.
- Perengano: No se han encontrado raíces en otras palabras antiguas y/o de otros idiomas, lo que hace pensar que puede ser una combinación que se realizó del apellido Pérez con la palabra mengano.
Tanto zutano, mengano y perengano, son palabras que suelen utilizarse seguidas de fulano, o citando a todos en la coletilla para hacer referencia a una situación en la que intervienen personas desconocidas, de mala fama o a quienes no se desea nombrar.
¿Ya conocías esta expresión?
Con Información de Claro y DirectoMx